El suelo posee una determinada capacidad de retener sus elementos
nutritivos, además podríamos compararlo con un organismo vivo, debido a
que en él actúan variadas formas de vida que actúan sobre sus procesos
de regulación química y por lo tanto el equilibrio nutricional del
mismo, siempre basado en su origen de formación (material parental).
De tal manera que debemos conservar este balance para mantener su
estructura química y por lo tanto la física, esto lo podemos lograr
haciendo un uso racional del recurso fertilizantes agregando solamente los
elementos que en él se encuentren deficientes y no hacerlo en forma
excesiva, pues podríamos causar serios desbalances nutricionales,
llegando con seguridad a niveles de toxicidad en el suelo.
Podríamos ilustrar esta explicación comparando el suelo con un
recipiente, en donde este solo es capaz de contener la cantidad de
material que su capacidad lo permita, y lo que sobrepase su capacidad se
desbordaría, lo que en el suelo significaría niveles intolerables para
nuestros cultivos, además de causar lo que comentábamos con relación a
pérdida del equilibrio natural del suelo (desbalances nutricionales), lo
que causaría procesos químicos muy negativos hasta llegar inclusive
hasta grados de muy difícil o no-recuperación del equilibrio natural del
suelo.
Representa la capacidad total de nuestro suelo para
contener todos los elementos nutricionales necesarios para
nuestros cultivos.
Representa el contenido de elementos nutritivos que puede tener un
suelo en particular, esto no los dice los resultados obtenidos de un
análisis de muestra de suelos, por esto es tan importante utilizar
esta herramienta de diagnóstico, de esta manera podremos realizar un
buen plan de fertilización para el cultivo que vamos a sembrar,
puesto que sabremos que elemento nutricional le hace falta y cual no,
pero para obtener buenos resultados debemos tomar primero una buena
muestra representativa, para eso debemos consultar a un técnico
agrícola para aprender a tomarla.
Al momento de conocer las cantidades necesarias de fertilizantes a
agregar, nuestro suelo quedaría de esta manera para que él pueda
cumplir con las necesidades nutricionales de nuestros cultivos, y de
esta manera solo agregando lo que necesita, podremos mantener un
equilibrio en el suelo y proporcionar un buen desarrollo al cultivo,
además de obtener ahorro económico, buena producción, conservación
de nuestros suelos, equilibrio ecológico, etc.
Si hacemos uso irracional o descontrolado del recurso fertilizante
causaríamos mucho daño tanto para el suelo y la naturaleza como para
nosotros mismos, debemos tratar de hacer un esfuerzo para evitar el
uso abusivo de los fertilizantes en dosis no adecuadas para las
condiciones en que se encuentra el suelo y solo aplicar lo que sea
necesario, así conservaremos los recursos que nos da nuestra
naturaleza y así ofrecer un ecosistema justo para las próximas
generaciones.
Podríamos agregar que
nuestras mezclas poseen la
característica de ofrecer materia prima de origen natural como es el caso
del SULPOMAG® de IMC y los Nitratos de
SQM.
De tal forma que nuestros productos colaboran con el equilibrio natural
de nuestros suelos agrícolas.